Categoría: Clásico
Título: Hachiko
Autores: Luis Prats
Editorial: La Galera
Número de páginas: 152
Año: 2015
Género: Juvenil, hechos reales, clásico
Saga: –
Título: Las mil y una noches
Autor: Anónimo
Editorial: Kindle
Número de páginas: –
Género: Narrativo, ficción, literatura
Precio: –
Saga: –
En la tercera hornacina del altar mayor, del lado del Evangelio, allí estaba la noticia. La lápida saltó en pedazos al primer golpe de la piocha, y una cabellera viva de un color de cobre intenso se derramó fuera de la cripta. El maestro de obra quiso sacarla completa con la ayuda de sus obreros, y cuanto más tiraban de ella más larga y abundante parecía, hasta que salieron las últimas hebras todavía prendidas a un cráneo de niña. En la hornacina no quedó nada más que unos huesecillos menudos y dispersos, y en la lápida de cantería carcomida por el salitre sólo era legible un nombre sin apellidos: Sierva María de Todos los Ángeles. Extendida en el suelo, la cabellera espléndida medía veintidós metros con once centímetros
Título: El principito
Autor: Antoine de Saint-Exupéry
Editorial: Kindle
Número de páginas: 96
Género: juvenil, ilustrado.
Precio: 13€ (Pincha aquí)
Saga: –
«El Principito habita un pequeñísimo asteroide, que comparte con una flor caprichosa y tres volcanes. Pero tiene “problemas” con la flor y empieza a experimentar la soledad. Hasta que decide abandonar el planeta en busca de un amigo. Buscando esa amistad recorre varios planetas, habitados sucesivamente por un rey, un vanidoso, un borracho, un hombre de negocios, un farolero, un geógrafo… El concepto de “seriedad” que tienen estas “personas mayores” le deja perplejo y confuso. Prosiguiendo su búsqueda llega al planeta Tierra, pero, en su enorme extensión y vaciedad, siente más que nunca la soledad. Una serpiente le da su versión pesimista sobre los hombres y lo poco que se puede esperar de ellos. Tampoco el zorro contribuye a mejorar su opinión, pero en cambio le enseña el modo de hacerse amigos: hay que crear lazos, hay que dejarse “domesticar”. Y al final le regala su secreto: “Sólo se ve bien con el corazón. Lo esencial es invisible a los ojos”. De pronto el Principito se da cuenta de que su flor le ha “domesticado” y decide regresar a su planeta valiéndose de los medios expeditivos que le ofrece la serpiente. Y es entonces cuando entra en contacto con el aviador, también el hombre habrá encontrado un amigo…»