El libro continua con un narrador en primera persona, desde el punto de vista de Samuel de Juan, un profesor universitario de alemán que ya conocíamos en la primer entrega de esta saga.
Volvemos a encontrarnos con varios personajes, pero todo gira en torno a nuestro protagonista, Samuel, quien tras haber encontrado el amor vuelve a perderlo. Tenemos personajes secundarios que no tienen una gran fuerza en escena como Gabriela y Titus.
La trama es muy líneal, no te pìerdes en ningún momento, todo tiene su explicación y esto logra que el lector avance junto con el protagonista, que crezca con él.
La novela está dividida en tres partes y un epílogo, los capítulos son de 4/5 páginas, correremos por las calles de Japón y con los detalles que nos da el autor podremos imaginar que estamos allí.
Tras comenzar la novela ya podemos intuir que Samuel va a sufrir una gran perdida porque Gabriela ha decidido marcharse de viaje pero no volverá.
Nuestro protagonista ha empezado a recibir unas postales muy especiales de Japón, cuando en una de ellas encuentra la palabra WABI-SABI en ella recurre a Titus para encontrar el significado, así que Titus comienza a presionar a Samuel de que aproveche las vacaciones escolares para encontrar a esa persona que le manda las postales.
La verdad es que el libro no aporta muchísimo, no como el primero, pero si que nos insiste en que la cultura japonesa tiene mucho que enseñarnos a los demás. Sobre todo en fijarnos en la belleza de lo que es imperfecto.
Así pues, si quieres una lectura fresca para el verano y te interesa conocer un poco más Japón este es tu libro.
- Venimos de la nada y hacia la nada nos dirigimos. Entremedio somos algo. Y ese algo es lo que llamamos vida.
- Aún no había entendido que unos segundos de intensa felicidad dejan una huella más profunda en el alma que toda una vida de monótona espera.
- Demasiado a menudo, en la vida, las cosas no pasan como esperamos.
- El mundo es imprevesible, pero los sabios insisten en que todo pasa cuando tiene que pasar.
- Quizá solo cuando aprendamos a contemplar sin filtros lo más pequeño, seremos capaces de volver los ojos hacia nosotros mismos.
Melania Casajust Santos
¡Hola! No he leído la primera parte pero le voy a echar un vistazo. A mí lo que me llama la atención es el tema de la cultura japonesa que la verdad es que siempre me suele fascinar. ¡Un beso!
Yoli - Lectora de 1994
Hola!!
Los puedes leer independientes, quiero decir con esto que no hace menciones al primer libro y que si las hace lo documenta muuy bien para no dejar cabos sueltos.
Un besote!