Reseña: Despierta ~ Beth Revis

Una nave espacial que es un mundo diminuto.
Generaciones de tripulantes que viven y mueren en ella, con la esperanza de que sus hijos lleguen al planeta prometido.
Una carga de personas crionizadas que solo despertarán al final del viaje.
Todo está perfectamente ordenado; todo debe seguir un guión escrito de antemano.
Y sin embargo…
Amy despierta en un momento que no debería formar parte de su vida.
Elder debe asumir un papel que no quiere desempeñar.
Ninguno de los dos encaja en el gran puzle de la nave.
Y hay otra pieza suelta: un asesino.
Amy y sus padres se someten voluntariamente a un proceso de criogenización. Permanecerán congelados durante trescientos años. En ese tiempo viajarán en una nave cuyo destino es otro planeta con las condiciones idóneas para que sobrevivan los hombres.
Elder ha nacido en la nave. Cuando Eldest fallezca, él será el próximo líder, el encargado de llevar a la tripulación al nuevo planeta.
Pero algo no sale como debiera. Amy despierta antes de lo previsto. Y entonces ya nada será igual…

Con dos narradores en primera persona desde dos protagonistas diferentes nos adentramos en una distopia futurísta.

Empezamos la historia con una familia de tres, la hija, Amy, será nuestra protagonista y una de los narradores durante el transcurso de la novela. Conforme nos adentramos en la historia conoceremos nuevos personajes, entre ellos a Elder, el otro protagonista con su toque de narrador. Nuestros dos narradores son muy diferentes el uno del otro, aun así tendrán aspectos en común.

Personajes secundarios pero de gran importancia son, Eldest, que estará muy presente durante toda la novela, Doc, el médico de la nave, Harley, amigo de Elder y Orion un archivero que habla bastante con Elder.

Es la primera vez que leo a Beth Revis y tiene una forma descriptiva impresionante, la trama de la historia así como los detalles más importantes están muy cuidados y al ser con un toque futurista debe ser complicado hilar todo sin que haya ningún fallo, así pues con las descripciones tan logradas y la prosa tan suelta y rápida, el lector puede devorar las páginas en nada.

Esta lectura llegó a mi vida gracias a Ana de Corazón, tinta y papel y es que lo he leído con ella y junto a Laura de Alma Lectora. Muchos de los que me seguís por las redes sabéis que me está costando últimamente engancharme a los libros, pues he de decir que este me lo he devorado en 3/4 días.

La novela empieza un poco lenta, conocemos a Amy y a sus padres en una situación dura, se están «congelando» para viajar por el espacio durante 3 siglos para poder colonizar un nuevo planeta, la autora ha sabido plasmar el dolor de los padres de Amy al pasar por la congelación. Amy me ha parecido un personaje fuerte, con una personalidad muy marcada y sobre todo segura de si misma, no duda en elegir lo que cree correcto y sobre todo es sincera.

El siguiente capítulo lo veremos desde el punto de vista de Elder, un joven que vive en la nave Fortuna y el cual está en una fase de aprendizaje para poder liderar la nave, para ello Eldest debe formarle sobre todo aquello que debe cuidar y es que su principal cometido es mantener a salvo a todos los habitantes de la nave.

Fortuna es una nave extraña, ha pasado por cambios según ha ido avanzando el tiempo, en ella pueden llegar a vivir 2000 personas, pero lo que me ha parecido más raro y extraño, que sin duda merece un aplauso a la autora por la innovación, es la forma de comportarse de los habitantes de la nave, cada personaje es diferente al anterior, en cuanto a comportamiento. También hemos de tener en cuenta que nos situamos algunos siglos después de la congelación de Amy, con lo que han pasado muchas generaciones dentro de la nave y por tanto el aspecto físico en todos los habitantes es muy semejante.

En definitiva, la trama ha sido muy completa, ha conseguido mantenerme en vilo hasta terminarlo y ahora solo tengo ganas de leer el siguiente, además de que el sistema que ha creado está muy bien hilado y pocas cosas quedan sueltas.

• No me gusta el tiempo que paso soñando. Se parece demasiado a la muerte.